El coño de la octogenaria le volvía loco
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Un hombre musculoso entra en su vida y ella, ya pasado los 40 años, entiende que es una de pocas oportunidades que podrá volver a tener. Ya está casada, y eso es bueno y malo. Bueno para ella y malo para su marido que jamás le follara el culo de esa forma. Porque este tío tiene una polla tan grande que hace que le llegue hasta la garganta. Entonces no puede hacer menos que disfrutar. Porque es lo que hace una zorra madura. Tiene las tetas operadas y para algo gasto ese dinero. Ahora tiene que pasar tiempo montando los cuernos porque es la mejor forma de disfrutarlo.