La zorra siempre ha montado los cuernos con el vecino

El tío tenía bastante claro lo que quería, pero por si aquella madurita tenía alguna duda pronto señaló donde tenía que ir. En efecto, ya que estaba allí no la iba a dejar marchar sin una buena mamada, y ella lo sabía. Al poco ya estaba sacándole la polla como una buena y obediente mujercita. Mientras se la chupaba él seguía con su ordenador portátil, está claro que este tío sabía bien como tratar a una milf como ella.
Después cuando la tenía ya bastante dura la tumbó boca abajo y con cierta violencia comenzó a follársela como a una perra. A sus 37 años de edad ella sabía lo que quería por supuesto, y si estaba con él era precisamente por como se la follaba.