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Después de la pillada que le metió su vecino masturbándose en su piscina era imposible que negara la evidencia: estaba muy cachonda y no podía disimular. Lo que pasa es que para que no pareciera una mujer facilona le pidió que si le podía hacer un masaje, aunque evidentemente ambos sabía cómo acabaría aquello. Mientras la masajeaba y le ponía bronceador solar, la puta se fue quitando poco a poco el bikini hasta quedarse totalmente desnuda. Vaya tetazas tenía y qué coño peludito más rico joder, cualquier en el lugar del tipo se habría puesto enfermo y muy nervioso, pero nos da en la nariz que ese señor no es la primera vez que se la folla…