Era fea, pero que bien follaba la puta

Finge que está supervisando lo que él está haciendo, algo que se le hace muy común al chaval, ya que por su color, siempre piensan que se puede robar y por ende, él no se puede robar nada porque siempre lo están vigilando. Aunque la razón de la señora, es completamente diferente. Ya que anda un poco cachonda y de pronto y muy rápidamente, la abuela se manda el pollón del jardinero. El chaval no la vio venir y sin darse cuenta, ya se estaba follando el coño de la vieja. Entonces no le quedó otra opción que seguir haciéndolo hasta poder correrse.