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Más casero y amateur no puede ser el polvo que vais a ver a continuación y aunque la calidad del vídeo podría ser mejor, lo que importa es quienes son sus dos protagonistas… Ellos son dos hermanastros de treinta y tantos años que han sucumbido al incesto después de que ambos se hayan divorciado. De siempre habían tenido química y seguro que habían fantaseado con chingar alguna vez, pero cada uno hizo su vida y aquello quedó en eso, una mera fantasía. Sin parejas de por medio y totalmente solteros ha llegado el momento de saldar las cuentas pendientes que tenía.