Vieja presume de tener un clítoris enorme

Ayy que manos más largas tienen algunos jefes ¿verdad?. La verdad es que son bastante cabrones porque se aprovechan de su estatus y de su poder para seducir a sus secretarias. Está claro que ellas obviamente se pueden negar a tener sexo con él, pero hay un alto porcentaje de mujeres casadas que acaban rendidas a la cartera de un hombre con la cartera bien nutrida. Mientras estaban repasando las cuentas este cabrón empezó a meter la mano por debajo de la falda de su secretaria y su intención era clara: desnudarla y follársela por el culo y tuvo la gran suerte de que ella aceptó.