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Dicen que las mujeres divorciadas son peligrosas, pero más aun cuando superan los 60 años. Esta madura española lo tenía claro, a ella le gustaban muy jovencitos, a poder ser de 18 o 19 añitos. Vamos, lo que suelen llamarse yogurines. Así que cuando tuvo la oportunidad de follar con uno ni se lo pensó. Nada más llegar a su casa ya estaba desnudándolo para ver su juvenil cuerpo y totalmente desnuda le comió su polla. Ella era algo gordita y tenía dos tetas enormes, como casi todas las mujeres de su edad. Pero eso a un chico como él le gustaba, y mucho. Allí en la cama se la folló como a una perra en varias posturas diferentes, su polla dura taladraba su maduro coño. Por eso le gustaban tanto los jovencitos. Al final el muchacho se corrió en su boca mientras ella disfrutaba como una golfa.