El vendedor de refrescos no se lo podía creer

A sus 44 años de edad esta mujer era impresionante. Sus enormes tetas y su cuerpo bien trabajado en el gimnasio daba sus resultados, era realmente hermosa. Una de esas milfs que cualquiera querría follarse, pero a ella no le iba cualquier tío. Empezó a desnudarse y le mostró su perfecto cuerpo, aunque él solo tenía ojos para sus gigantescas tetazas. Se quedó totalmente desnuda y le demostró que todavía estaba en forma, follar con ella iba a ser impresionante y lo sabía. Se puso encima de él mientras se comía su polla y fue quitándole toda la ropa. Luego se sentó sobre su verga y se la metió totalmente entera, le cabía bien.
Tras follársela un rato descubrió que esa zorra era capaz de correrse a chorro, mientras se la metía fue cuando pudo sentir su squirting. Eso le puso tan cachondo que le comió el coño para probar sus fluidos, y luego se la volvió a meter para correrse dentro.